Nuestro objetivo: promover la inclusión social y garantizar la igualdad de las personas gitanas
En 2016 iniciamos una nueva etapa en la gestión de fondos europeos, con la renovación de nuestros principales programas de empleo y educación (Acceder y Promociona), pero, además, hemos ampliado nuestro marco de acción con programas específicos para dos de nuestros grupos prioritarios: jóvenes y mujeres. Reforzaremos nuestra intervención con la juventud gitana con programas de gran impacto como el Aprender Trabajando. El nuevo programa Calí. Por la igualdad de las mujeres gitanas supone abordar de manera específica la igualdad y la lucha contra la discriminación, especialmente de las mujeres gitanas.
Con una plantilla de unos 700 profesionales y más de 600 personas voluntarias, y con un presupuesto anual para 2016 de 22 millones de euros, hemos trabajado de manera directa con más de 30.000 personas, a las que hemos apoyado en su proceso de incorporación al mercado laboral, en su desarrollo educativo, a través del refuerzo escolar, orientación educativa o apoyo económico, en el acceso a derechos básicos o en la asistencia ante un caso de discriminación.
Nuestra intervención social continúa centrada en programas transformadores, a medio plazo, procesos e itinerarios personalizados, que buscan dar respuesta a las necesidades de las personas, que producen resultados tangibles y que contribuyen a reducir las desigualdades sociales. Pero, además, van ganando espacio y peso en nuestra actividad las acciones de incidencia y sensibilización que refuerzan y complementan nuestra intervención social. Un buen ejemplo de ello es la elaboración del Mapa de Vivienda y Comunidad Gitana 2015, un informe presentado en septiembre de 2016, que nos aporta los datos más recientes sobre situación social de la comunidad gitana y orienta nuestras acciones de incidencia hacia una de nuestras prioridades políticas: el objetivo de chabolismo cero en 2020.
El programa de empleo Acceder sigue siendo, con diferencia, el pilar de nuestra intervención social. Año a año, y ya van 16, va creciendo el número de personas que acceden al mercado laboral por cuenta ajena gracias al programa. En 2016 hemos atendido a más 18.000 y se han conseguido 5.757 contratos de trabajo. Para conseguir ese buen resultado sabemos que necesitamos reforzar la alianza con las empresas, y son ya 1.361 las empresas colaboradoras del programa.
Nuestra apuesta por la formación y el empleo de la juventud gitana se refleja en el impulso y crecimiento del programa Aprender Trabajando, una iniciativa que comprende un itinerario formativo de 6 meses en empresas de primer nivel. En 2016 se ha extendido a 22 localidades y han participado 440 jóvenes, 124 de ellos y ellas han conseguido un empleo, y 126 han decidido retomar la ESO.
En el ámbito de la educación, nuestro objetivo es conseguir que los niños y niñas gitanas terminen la Educación Secundaria Obligatoria y para ello, nuestro programa Promociona ha trabajado en 2016 con casi 1.300 chicos y chicas a través de las 82 Aulas Promociona que tenemos repartidas por toda España. 143 se graduaron este año. Hacemos refuerzo escolar y orientación educativa, trabajamos con el alumnado, sus familias y los centros educativos. Pero, además, apoyamos la continuidad en los estudios, y este año hemos concedido 283 becas y ayudas a estudios postobligatorios. En 2016 hemos lanzado la primera convocatoria de las Becas Fundación Secretariado Gitano-Luis Sáez, dirigidas a jóvenes gitanas universitarias en cursos de postgrado.
La desigualdad afecta de manera desproporcionada a las mujeres gitanas, por eso apostamos por programas que aborden su especificidad y compensen esas desigualdades. Los programas Sara Romí o Calí trabajan con itinerarios sociopersonales y prelaborales para conseguir la autonomía de las mujeres gitanas y favorecer su incorporación al mercado laboral, incorporando la igualdad entre hombres y mujeres y la atención a casos de violencia de género dentro de nuestras intervenciones. A lo largo de 2016 hemos trabajado con 4.820 mujeres gitanas.
La promoción de la igualdad y el derecho a la no discriminación en el centro de nuestra acción
En 2016 la Fundación Secretariado Gitano refuerza su perfil como entidad promotora de la igualdad y defensora de los derechos de la comunidad gitana, especialmente del derecho a la no discriminación, con la puesta en marcha de un nuevo programa del Fondo Social Europeo: Calí. Por la igualdad de las mujeres gitanas. Un programa que nos ha permitido crear la figura de Técnica de igualdad en los equipos de 28 ciudades para trabajar específicamente la igualdad de las mujeres gitanas y combatir la discriminación de la comunidad gitana en su conjunto.
Este programa, junto al Servicio de Asistencia a Víctimas de Discriminación Racial o Étnica, que coordina la FSG, supone, en la práctica, incorporar la Igualdad y la Lucha contra la Discriminación como un eje fundamental de nuestra actividad en los territorios.
Esta intervención directa con las personas se combina con las acciones de incidencia política y sensibilización social. En un año con la cita electoral del 26J, hemos difundido entre los partidos políticos documentos específicos con nuestras prioridades políticas en el ámbito de la educación, el empleo, la vivienda y la igualdad. Hemos sido muy activos en la reacción pública y denuncia ante determinadas situaciones que afectan a la vulneración de derechos de la población gitana, reforzando nuestro perfil reivindicativo ante casos que atentan contra la dignidad de la comunidad gitana, como la emisión de programas de televisión como Los Gipsy Kings, o los sucesos vejatorios contra mujeres gitanas rumanas en la Plaza Mayor de Madrid. Continuamos también nuestra línea de trabajo de litigación estratégica con la denuncia de casos de vulneración de derechos de las personas gitanas.
En el ámbito europeo, la FSG refuerza su perfil como actor clave siendo entidad co-organizadora de la Roma Week, la celebración por parte de las instituciones europeas en torno al 8 de abril, Día Internacional del Pueblo Gitano, con la organización de distintos actos que convocan a representantes tanto de la Comisión Europea como del Parlamento, para visibilizar la realidad de la comunidad gitana en la Unión Europea y llevar a cabo acciones de incidencia política contra el antigitanismo.
En el ámbito de la sensibilización e incidencia social, se ha iniciado una nueva fase de campañas de sensibilización que pretenden visibilizar el impacto de la discriminación en las personas gitanas y la vulneración sistemática del derecho a la no discriminación de los gitanos y gitanas. La campaña “El tatuaje que más duele” supone el inicio de una nueva etapa marcada por un perfil más visible y reivindicativo de la FSG en la defensa de los derechos de las personas gitanas.
En la FSG estamos cada vez más convencidos de que queremos ser una entidad abierta, participativa, con una amplia base social comprometida con nuestra misión. Trabajamos día a día para sumar personas, entidades o empresas a nuestra causa y que nos apoyen social y económicamente para llevar a cabo nuestra labor. Va creciendo el número de personas y empresas socias de la Fundación.
En 2016 organizamos nuestras 3as Jornadas de Puertas Abiertas en todas nuestras sedes, reuniendo a casi 10.000 personas que se acercaron a conocer nuestra entidad. Pero, además, a lo largo del año organizamos conciertos, cenas solidarias, encuentros con participantes, con empresas…
Tras la concesión a la FSG en 2015 del Premio Fundación Princesa de Girona, iniciamos 2016 con una Audiencia de SM la Reina Doña Letizia a una amplia delegación de la Fundación para conocer mejor nuestro trabajo a favor de la inclusión social y la igualdad de oportunidades de la comunidad gitana. Una señal de reconocimiento institucional a nuestra labor como entidad social que se completó con la visita de la Reina Doña Letizia a la sede de nuestra Fundación en el mes de abril.
Además del reconocimiento institucional, vamos ganando prestigio social, y nuestro trabajo también es reconocido cada vez más por entidades sociales (como el Premio Solidarios ONCE en el Principado de Asturias) o por organizaciones de la sociedad civil (como el Premio de la Fundación Corresponsables por nuestra campaña de sensibilización social #Leonordejalaescuela sobre el derecho a la educación). En 2016 la FSG ha entrado a formar parte de Los Imprescindibles de la Fundación La Caixa.
Un reconocimiento con un especial valor sentimental fue el Premio a la Concordia que el Instituto de Cultura Gitana otorgó a nuestro Presidente, Pedro Puente, en la ceremonia del 8 de abril de 2016. Un premio a una larga trayectoria personal e institucional que demuestra su compromiso con la comunidad gitana.
Pero la Fundación Secretariado Gitano también sabe reconocer el compromiso y el esfuerzo de personas o entidades que desarrollan una destacada labor en la defensa y apoyo de la comunidad gitana. Por eso, los Premios FSG han adquirido un valor notable en nuestra actividad y van ganando prestigio social. En la ceremonia de entrega de la IV edición, que tuvo lugar en febrero de 2016, se convocó a personalidades del ámbito social, cultural y empresarial, para premiar a Miguel A. Aguilar, Fiscal Coordinador del Servicio de Delitos de Odio de la Fiscalía Provincial de Barcelona, a la Fundación Accenture, a la periodista Ana Pastor, al IES Fernando de los Ríos de Fuente Vaqueros (Granada) y al Tío Pascual (Pascual Jiménez, de Zaragoza).
Somos una entidad grande y compleja, con un presupuesto anual de 22 mill. de euros, y tenemos una financiación cada vez más diversificada, pública y privada. Gestionamos Fondos Europeos desde el año 2000, y en 2016 iniciamos una nueva etapa con la aprobación de cuatro proyectos del Fondo Social Europeo, que suponen un presupuesto de 32mill. € hasta 2019. Pero además, gestionamos recursos públicos de otras muchas administraciones a nivel estatal, autonómico o local, y cada vez son más las empresas, instituciones o personas particulares que confían en la FSG y apoyan económicamente nuestra actividad.
Esta financiación compleja requiere de sólidos mecanismos de gestión. Por eso nos hemos ido dotando de un sistema de procedimientos muy estandarizados que garanticen su eficacia y su eficiencia, y que mejoren la calidad y transparencia de la Fundación.
Las cuentas de la FSG son auditadas anualmente por alguna de las principales empresas auditoras de nuestro país y se aprueban en el Patronato. En 2016, además, se ha constituido dentro de nuestro Patronato una Comisión de Control y Auditoría para reforzar el papel del Patronato en la gestión de la entidad. Las cuentas auditadas y la memoria económica y de actividades se remite anualmente al Protectorado de Fundaciones, tal y como exige la Ley de Fundaciones, y se publican en nuestra web.
Contamos con la certificación de nuestro Sistema de Gestión por la NORMA ISO 9001:2008, y nuestra entidad ha sido acreditada por la Fundación Lealtad con el Sello de Transparencia y Buenas Prácticas.
El valor de nuestro capital humano
La FSG es una entidad que cuenta con una plantilla de unos 700 profesionales en equipos con perfiles muy diversos y multidisciplinares, a los que hay que sumar la labor de más de 600 personas voluntarias. Un capital humano que hay que cuidar, y que requiere de condiciones laborales y salariales dignas, así como de canales y espacios de participación en la toma de decisiones de la entidad.
En el mes de mayo se firmó el III Convenio Colectivo entre la Dirección de la entidad y el Comité Intercentros, en representación del conjunto de trabajadores y trabajadoras, alcanzando así un acuerdo satisfactorio para ambas partes que supone un clima laboral estable y propicio para el compromiso con la entidad.
En 2016 se inició además el proceso de elaboración del próximo Plan Estratégico de la FSG 2017-2023, que prevé canales y espacios de participación para el conjunto de la plantilla, de manera que entre todos y todas vayamos diseñando una visión compartida de la FSG para los próximos años.
