

Esta guía elaborada por la Fundación Secretariado Gitano (FSG)
tiene como objetivo principal ofrecer orientaciones a las organiza-
ciones que trabajan por la igualdad de trato y la no discriminación,
a agentes clave y a la ciudadanía, sobre qué es el discurso de odio
y cómo combatirlo más eficazmente.
El lenguaje tiene el poder de comunicar, pero
también tiene el poder de herir. El odio a las mi-
norías y su discriminación también se ejercen por
medio de expresiones, declaraciones, mensajes
en redes sociales, textos, videos, que pueden ser
insultantes y denigrar a una persona o a un gru-
po de personas por su pertenencia étnica, por
tener una orientación sexual minoritaria, por ser
de otro país, por su edad, su religión, por vivir en
la calle, o por otras circunstancias.
En el caso de la comunidad gitana,
existe una
larga tradición de discursos y expresiones an-
tigitanas, que afectan a la dignidad de las per-
sonas gitanas y que en última instancia incitan
a la discriminación y al odio.
Se trata de textos
y declaraciones que asocian a los gitanos con la
delincuencia, la falta de higiene, la pereza o el en-
gaño, desde las duras palabras de Cervantes en
1613 al inicio de La Gitanilla (“Parece que los gi-
tanos y gitanas solamente nacieron en el mundo
para ser ladrones…”) hasta declaraciones actua-
les de políticos de distintos países europeos.
INTRODUCCIÓN
Por otra parte, las redes sociales se han converti-
do desde hace años en una plataforma ideal para
la difusión del discurso de odio. Escudándose
en el anonimato, muchos usuarios emiten estos
mensajes, que pueden llegar a tener grandes au-
diencias. Los discursos antigitanos, antisemitas,
homófobos, xenófobos, islamófobos, etc. prolife-
ran en estas redes, preparando las condiciones
de la exclusión y la discriminación, y atentando
gravemente a la dignidad de las personas.
Por todas estas razones desde la FSG considera-
mos necesario combatir de forma más eficaz el
discurso de odio, con el fin de lograr una socie-
dad donde se respeten los derechos de todas las
personas, y donde los actos de discriminación y
de odio no queden impunes.