Si la pobreza y la exclusión afectan a una importante proporción de las familias gitanas, la mala imagen social, el rechazo y las situaciones de discriminación afectan al conjunto de la comunidad. No avanzaremos en el camino de la incorporación social mejorando solamente las condiciones de vida, sino haciendo frente a las situaciones de discriminación y a los factores que la hacen posible.