03 de Septiembre de 2024
FSG
Despedimos al cielo a nuestra Madre Carmen, Carmen López Arjona.
Junto a sus familiares y hermanas Hijas de Jesús asistimos a la Eucaristía en su residencia en Valladolid. Un acto emotivo donde recordamos el camino marcado por Carmen. Los difíciles inicios que se encontró con temas que hoy vemos como básicos, gestionar el DNI, escolarización de los menores, la escuela puente...
Son más de 60 años dedicados a la atención del pueblo Gitano, incidiendo en Vigo y más tarde en Coruña.
Consiguió que muchos estudiantes universitarios se unieran a la causa y junto con ellos empezaron a realizar el seguimiento escolar y apoyo. A través del deporte incidió en hábitos de vida saludables y, sobre todo, ocupar el tiempo libre con actividades sanas.
Carmen López Arjona ha sido patrona de Honor de la Fundación Secretariado Gitano, obtuvo reconocimiento social por parte del Ayuntamiento de Vigo nombrándola Viguesa Distinguida, así como la Fundación Secretariado Gitano le hizo entrega en 2016 de uno de sus premios en la modalidad Solidaridad con G por una vida dedicada al Pueblo Gitano.
Somos muchas las personas gitanas que siempre la llevaremos en el corazón. El mensaje que perdurara cuando trabajamos con personas es el que con cariño y paciencia todo se puede.
Lacho Drom Madre Carmen.
Fernando (FSG Vigo)
El viernes por la noche nos dejó la Madre Carmen y es bueno dedicarle unas líneas en esta página para recordar su trabajo y su figura.
La conocí cuando yo tenía 17 años, en su residencia en el barrio de Cabral, en Vigo. Nos habían propuesto hacer un voluntariado con gitanos dando clases y alguien se había enterado de que había una “monja de los gitanos” y que necesitaba voluntariado. Allí me fui con otros compañeros a una reunión con ella y otra religiosa, Carmen Zamorano.
En esas clases ella nos explicaba pacientemente cuestiones como las relaciones entre las familias, por qué "este con aquel no", por qué se casaban tan jóvenes, etc. Siempre con su cámara, su libreta y su lema “las cosas bien hechas, bien parecen”.
De casa en casa, de piso en piso y de chabola en chabola. Se enteraba de todo, lo sabía de todo, pues los gitanos le contaban todo. Sabia quién se había escapado o quién se iba a escapar, quién había lelao y quién no. Y si los gitanos se metían con ella, que los hubo, ella nunca respondía. Varios ejemplos de esto aún recuerdo.
Poco a poco el trabajo se fue profesionalizando, y entidades como Cáritas primero y luego el Secretariado Gitano fueron articulando los programas que ella de manera intuitiva había comenzado con un grupo de voluntarios. Y su trabajo seguía siendo el mismo, acompañar a los gitanos en ese avance social que estaban experimentado y apoyar a sus voluntarios, trabajadores, etc., compañeros de camino que se fueron sumando a esa causa.
Muchos de aquellos voluntarios aún trabajamos en el ámbito social, y algunos de esos todavía lo hacemos con gitanos, y eso se lo debemos a ella.
La mayor parte de su labor se desarrolló en Vigo y en la Coruña. En ambos sitios con comunidad gitana y en ambas ciudades en barrios humildes y sencillos como Cabral y Elviña.
Lacho Drom Madre Carmen.
Gorka (FSG Vigo)
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