22 de Enero de 2020
FSG - Subdirección de Incidencia y Defensa de Derechos
En el caso de España, se trata de la tercera vez que se somete a este mecanismo. En esta ocasión tendrá que dar cuenta de los avances realizados y del grado de cumplimiento de las recomendaciones realizadas por otros Estados y aceptadas con ocasión del último Examen Periódico Universal, al que se sometió en 2015. Además, deberá someterse a nuevas preguntas y recomendaciones de los Estados que participarán en el proceso.
La Fundación Secretariado Gitano, como organización de la sociedad civil implicada en el trabajo a favor de los derechos humanos y de su disfrute efectivo por parte de la comunidad gitana, ha participado muy activamente en este proceso, tanto a título individual, como aportando a los informes presentados como entidad miembro de la Plataforma DESC y la Plataforma de Infancia.
Así, y como parte del trabajo de la organización cada vez más intenso con las instituciones internacionales, se ha contribuido tanto al Informe realizado por el Gobierno español como al del propio Consejo de Derechos Humanos de la ONU. La organización también tuvo oportunidad de participar en las pre-sesiones del EPU que tuvieron lugar en diciembre del año pasado, y de esta manera trasladar a otros Estados los principales avances institucionales, así como los problemas que impiden el acceso por parte de las personas gitanas a los derechos humanos.
Una de las cuestiones sobre las que más ha insistido la FSG en este proceso es en la necesidad de aprobar una Ley Integral de igualdad de Trato y lucha contra la Discriminación que constituya un marco legal amplio que proteja a todas las víctimas de discriminación por cualquier motivo, sin perjuicio de un posterior desarrollo legislativo sectorial. Esta norma permitiría dar respuesta a muchas conductas discriminatorias que no tienen encaje en la legislación vigente y debería acarrear la creación de un Organismo independiente de Igualdad de trato con recursos suficientes.
La Fundación Secretariado Gitano también se ha referido al problema de la pobreza y de la exclusión social: según un reciente informe de la FSG, más del 80% del total de la población gitana se encuentra en situación de pobreza y el 46% es extremadamente pobre. Por otro lado, la tasa de pobreza infantil de la población gitana se sitúa en un 89% frente a un 30,7% en la población general. En este sentido, desde la FSG se hace un llamamiento a las autoridades españolas para que avancen en políticas públicas integrales y específicas para la reducción de la pobreza y pobreza infantil, así como la erradicación de la alta incidencia de la pobreza extrema y la pobreza infantil en la población gitana.
En cuanto al acceso a la educación por parte del alumnado gitano, la FSG, pese a reconocer la mejora en los datos respecto a años anteriores, ha puesto énfasis en el hecho de que tan solo el 17% de la población gitana mayor de 16 años tiene completados estudios de ESO o superiores, frente al casi el 80% de la población general, y de que 6 de cada 10 niños/as gitanos no terminan la E.S.O. Por todo ello, la Fundación Secretariado Gitano espera que este proceso sirva para que las autoridades pongan en marcha un plan de choque contra el fracaso escolar del alumnado gitano, establezcan medidas para prevenir y erradicar la segregación escolar que afecta al alumnado gitano y de origen migrante y promuevan políticas públicas que favorezcan la inclusión y reconozcan el valor de la diversidad, como la inclusión dentro del currículo escolar de la historia y la cultura del Pueblo Gitano.
La Fundación Secretariado Gitano también ha puesto énfasis en la marcada (y documentada) brecha existente entre la población gitana y el conjunto de la población en el acceso al mercado de trabajo, siendo especialmente notoria la brecha de género: hay una tasa de paro que alcanza el 52% (lo que supone más de 3 veces la de la población general, del 14,5%), y las mujeres gitanas padecen una evidente discriminación interseccional, con una tasa de empleo que solo llega al 16%. Por todo ello, se hace un llamamiento a reforzar los programas de formación y acompañamiento hacia el empleo con enfoque de género y adaptados a la población gitana, con medidas específicas para jóvenes, así como a aplicar medidas para combatir la discriminación hacia las personas gitanas en el mercado laboral.
Finalmente, en materia de vivienda, si bien se ha producido una evidente mejora, la FSG se ha referido a que un 8,6% de la población gitana sigue viviendo en infraviviendas, y un 2,17% (más de 2.000 familias gitanas) en chabolas. También se ha puesto énfasis en los casos de discriminación a personas gitanas que se siguen detectando en el acceso a la vivienda para compra o alquiler. Por ello, se insta a las autoridades españolas a tomar medidas para prevenir y perseguir los casos de discriminación en el acceso a la vivienda y a aprobar planes de acción para la erradicación del chabolismo y la infravivienda.
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