Fundación Secretariado Gitano

Comunicado de la FSG sobre los acontecimientos del colegio Compañía de María (La Enseñanza) de Logroño [editar]

• Igualdad y No Discriminación
• La Rioja

Madrid, 10 de marzo de 2017

Esta semana los padres de una niña de 4 años han presentado una denuncia acompañada de un informe médico de una pediatra a la Jefatura Superior de Policía de La Rioja ante "presuntos abusos, tocamientos y amenazas" a la menor por parte de un profesor del centro educativo Compañía de María “La Enseñanza”, de Logroño.

Al día siguiente de la denuncia, se produjo en la puerta del colegio una concentración de padres y madres para mostrar su apoyo al profesor denunciado, así como una amplia cobertura mediática del caso.

Respecto a este caso, desde la Fundación Secretariado Gitano:

• Solicitamos que, con independencia de la condición de la menor, se garantice la protección de la misma con las medidas que establece la legislación de protección de la infancia, con especial referencia al art. 2 de la Convención de los Derechos del Niño que establece que los derechos de dicha convención se aplicarán con independencia de la condición del origen étnico de los y las menores, y que “los Estados Partes tomarán todas las medidas apropiadas para garantizar que el niño se vea protegido contra toda forma de discriminación”.

• Confiamos plenamente en la actuación de la justicia, que es quien debe juzgar los hechos y decidir sobre las responsabilidades penales del investigado, si las hubiera y atendiendo al principio de presunción de inocencia.

Dicho esto, queremos hacer una reflexión sobre la reacción social que han tenido estos acontecimientos. Nos llama la atención que, ante un caso de presuntos abusos sexuales a una menor, todos los padres y madres de ese curso se manifiesten para dar su apoyo al profesor denunciado por dichos actos. Habitualmente, ante este tipo de casos, la reacción de las familias suele ser la de dar apoyo a la víctima o, al menos, la de un prudente silencio hasta conocer las decisiones judiciales.

Es inevitable preguntarse si esta inusual reacción no podría deberse a la condición étnica de la víctima (de etnia gitana). Si fuera así, nos encontraríamos ante una manifestación motivada por un sesgo discriminatorio, un hecho que debería hacernos reflexionar como sociedad.

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