10 de Diciembre de 2015
FSG
Desde la Fundación Secretariado Gitano, hoy 10 de diciembre, Día de los Derechos Humanos 2015, queremos hacer una reflexión acerca del ejercicio y disfrute de los derechos fundamentales por parte de determinados grupos vulnerables, con especial atención a la comunidad gitana.
Este año 2015 la ONU ha dedicado este Día al lanzamiento de una campaña de un año de duración para conmemorar el 50 aniversario de los dos pactos internacionales de derechos humanos: el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que fueron adoptados por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 16 de diciembre 1966. Los dos Pactos, junto con la Declaración Universal de los Derechos Humanos, constituyen la Carta Internacional de Derechos Humanos, que establece los derechos civiles, políticos, culturales, económicos y sociales que tiene todo ser humano al nacer.
Con el lema «Nuestros Derechos. Nuestras libertades. Siempre» esta campaña tiene como objetivo promover y dar a conocer los dos Pactos en su 50º aniversario. La campaña gira en torno al tema de los derechos y libertades (la libertad de expresión, la libertad de culto, la libertad a vivir libres de la miseria y la libertad a vivir sin miedo) que sustentan la Carta Internacional de Derechos Humanos. Estos derechos y libertades son tan relevantes hoy como cuando se adoptaron los Pactos hace 50 años, pero no toda la ciudadanía los disfruta de igual manera.
La comunidad gitana continúa sufriendo numerosas barreras en el ejercicio de estos derechos fundamentales básicos y este año desde la Fundación Secretariado Gitano queremos incidir especialmente en dos de ellos: el derecho a la Educación y el derecho a la Igualdad.
Hoy en día, sigue habiendo una gran parte de la juventud gitana española que no termina la educación secundaria obligatoria (64%); y sigue habiendo colegios con una alta concentración de alumnado gitano. Además, se vulnera el derecho fundamental a la Igualdad en los casos de discriminación y delitos de odio antigitanos que lamentablemente siguen produciéndose, como sucedió en el verano de 2014 en los ataques a familias gitanas en un pueblo de Andalucía, Castellar, hechos a los que la justicia no está dando una respuesta adecuada. Ayer mismo, conocíamos el Auto de la Audiencia Provincial de Jaén que propone el archivo de la causa, a pesar de los evidentes incidentes antigitanos que constan en las actuaciones (incendio de viviendas, manifestación antigitana, etc. ). Dicha resolución pone de manifiesto la falta de respuesta que nuestros tribunales ofrecen a las víctimas y la falta de aplicación de la legislación estatal y europea en el ámbito de la lucha contra la discriminación.
En este día, queremos hacer un llamamiento a toda la sociedad, y especialmente a los poderes públicos implicados en la defensa de estos valores supremos de nuestro ordenamiento jurídico, para que se establezcan las medidas necesarias que garanticen los derechos fundamentales de la comunidad gitana.
Finalmente, y dado que se acercan las elecciones generales, queremos recordar también a los partidos políticos que la comunidad gitana debe estar representada en sus políticas y actuaciones, ya que es responsabilidad de los poderes públicos garantizar los derechos humanos de toda la ciudadanía, incluyendo al pueblo gitano, que es parte integrante de la sociedad española.
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